Consejos para mantener fresca tu cocina en verano

Con el verano suben las temperaturas y, posiblemente, el lugar de la casa donde más lo notamos es en la cocina. Mantener fresca la cocina en verano es un acto que no preocupa en esta temporada. El fuego, el horno, el lavavajillas, el frigorífico… todos los electrodomésticos enchufados a la corriente hacen que la temperatura de nuestra cocina suba y no sea nada apetecible estar en ella.

Pero en Dinova Cocinas os traemos 5 trucos que puedes aplicar para refrescar tu cocina en verano y que puedas disfrutar de ella durante todo el año.

Cocina en verano: consejos

Juega con Ventanas y Persianas

Las ventanas y las persianas son herramientas clave para mantener la cocina fresca y confortable. Las ventanas pueden ser de gran ayuda para ventilar la habitación, permitiendo que el aire fresco entre y el aire caliente salga. Sin embargo, es importante usarlas de manera estratégica. Si dejas la ventana abierta durante todo el día, especialmente en las horas más calurosas, puedes estar dejando entrar más calor del que estás sacando.

Para maximizar el efecto de ventilación y mantener la cocina fresca, juega con las persianas y las corrientes de aire. Abre las ventanas y las persianas en las primeras horas de la mañana y durante la noche, cuando la temperatura exterior es más baja. Esto permitirá que el aire fresco entre en la cocina, ayudando a enfriar el ambiente. Cuando el sol comienza a salir y las temperaturas exteriores suben, cierra las ventanas y baja las persianas para evitar que el calor del sol entre y aumente la temperatura de la habitación.

Usa Ventiladores o Aire Acondicionado

Si las ventanas abiertas y las persianas no son suficientes para mantener la cocina fresca, los ventiladores y el aire acondicionado son excelentes alternativas. Los ventiladores ayudan a circular el aire, creando una brisa que puede hacer que la temperatura se sienta más agradable. Los ventiladores de techo, en particular, pueden ser muy efectivos para mantener el aire en movimiento. Si tienes aire acondicionado, úsalo para enfriar la habitación rápidamente. Sin embargo, es importante usar estos aparatos con moderación, ya que pueden generar un alto gasto energético. Ajusta la temperatura de manera que sea cómoda pero no excesiva, y apaga el aire acondicionado cuando no sea necesario.

Apaga los Electrodomésticos que No Uses

Cada electrodoméstico que funciona en la cocina genera calor adicional. Para minimizar el aumento de la temperatura, apaga o desconecta los aparatos electrónicos que no estés usando. Por ejemplo, si no estás cocinando, apaga el horno, la estufa y otros aparatos que generan calor. Aunque el frigorífico es esencial y debe mantenerse encendido, puedes cambiar tu forma de cocinar para reducir el uso del horno. Opta por preparar comidas frías o usar métodos de cocción que generen menos calor. Además, si necesitas usar la lavadora o el lavavajillas, programa estos aparatos para que funcionen a primera hora de la mañana o al final de la tarde, cuando las temperaturas sean más frescas y el impacto del calor sea menor.

Evita Encender la Luz en Exceso

La iluminación artificial no solo aumenta el consumo energético, sino que también contribuye al calor en la cocina. Las bombillas, especialmente las incandescentes, generan calor adicional que puede aumentar la temperatura de la habitación. Siempre que sea posible, aprovecha la luz natural que entra por las ventanas durante el día para iluminar tu cocina. Si necesitas encender luces artificiales, considera usar bombillas LED o fluorescentes compactas, que emiten menos calor en comparación con las bombillas incandescentes. Mantén las luces apagadas en áreas que no estás utilizando para reducir el calor y el consumo energético.

Implementando estos consejos, podrás mantener tu cocina más fresca y agradable durante los meses cálidos. Experimenta con diferentes combinaciones de ventilación, uso de electrodomésticos y luz natural para encontrar la estrategia que mejor se adapte a tus necesidades y a las condiciones de tu hogar.

Mantenla limpia

El último consejo que te damos para tu cocina en verano, es que la mantengas limpia. El verano no solo nos trae calor, sino que con él también llegan bacterias que se acumulan más fácilmente en los residuos que generamos en nuestro día a día.

Haz una limpieza a fondo de muebles y electrodomésticos para eliminar restos de alimentos que se echan a perder en menor tiempo que durante el resto del año. Y pon atención a la basura, intenta tirarla después de cada comida par que no genere bacterias ni malos olores con el calor.

Si deseas una cocina de diseño, no olvides que en Dinova Cocinas podemos ayudarte. Ponte en contacto con nosotros y disfruta del diseño en tu hogar.

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